La caléndula es una planta que se ha utilizado por sus propiedades curativas y ornamentales desde la antigüedad. Esta planta, también conocida como «flor de muerto», se caracteriza por su gran cantidad de flores de color amarillo y naranja que se abren durante el día y se cierran por la noche.
En El Jardín de Ana, cultivamos y secamos al sol nuestras flores de caléndula para poder ofrecer su máximo potencial curativo y decorativo. La caléndula es rica en compuestos antioxidantes, antiinflamatorios y antifúngicos, lo que la convierte en un ingrediente clave en muchos remedios naturales.
Entre los beneficios de la caléndula seca al sol se encuentran:
Antiinflamatorio: La caléndula puede reducir la inflamación en la piel y las membranas mucosas. Es útil en casos de inflamación de la piel, encías y úlceras.
Cicatrizante: La caléndula ayuda a estimular la producción de colágeno y regeneración de los tejidos, lo que la convierte en una opción natural para la curación de heridas, quemaduras y cicatrices.
Calmante: La caléndula tiene propiedades calmantes y relajantes que la hacen ideal para tratar trastornos del sueño y ansiedad.
Decorativa: Además de sus beneficios curativos, la caléndula es una flor muy decorativa que puede utilizarse para embellecer y aromatizar espacios interiores.
En El Jardín de Ana, nos enorgullece ofrecer caléndula seca al sol de alta calidad y cultivada de manera sostenible. Invitamos a nuestros clientes a explorar los usos y beneficios de esta maravillosa planta.